
Pocas cosas ilustran mejor que esta fotografía la llegada de la Cuaresma, y, ¿qué es la Cuaresma? Para algunos es el tiempo litúrgico que dura cuarenta días y que supone la preparación para la fiesta de la Pascua, comenzando el Domingo de Ramos. Para otros, tiene un significado tal vez más apasionado y menos profundo...La Cuaresma es el tiempo donde uno se prepara si, pero además también es periodo cargado signos evidentes de una transición a lo que viene y esto se deja ver en vírgenes vestidas de hebrea o en la degustación de torrijas (aunque hay gente que lleva degustandolas desde la Epifanía...) Ahora empiezan a aflorar los naranjos por la pronta llegada de la primavera, se suceden triduos, quinarios, septenarios y demás actos de las hermandades. Los escaparates se cubren de capirotes y de nazarenos de caramelo. Cualquier esquina ofrece una agradable fragancia a incienso por un pequeño puesto allí montado y resuenan en los oidos los tambores de las bandas ensayando. Las parihuelas cruzan las calles en las noches de Cuaresma para entrenar a los hombres que por un día serán los pies de Dios y su bendita Madre. Ya comienza El Llamador a diario y sólo queda contar el tiempo al revés para hacernos conscientes de que queda poco, puesto que estos símbolos nos conducen irremediablemente a una fiesta que esperamos con ansia y que estará aquí antes de que nos demos cuenta...
No hay comentarios:
Publicar un comentario