El 27 empezaba pronto en los despertadores, unos para preparar el proyector de vídeo, otros para recoger el hielo picado, otros para recoger los bastimentos a degustar, para otros la mañana deparaba dibujos navideños, otros se afanaban por llegar a Lebrija bajo la lluvia y para todos fue común la sorpresa y el susto...
A las 11 la primera llamada, ¿Es posible posponer lo preparado para otro día? Complicado cuando menos...Los problemas empiezan pronto, como decía Carlos Herrera "el tren, siempre el tren", varios amigos que vienen a visitarnos se quedan en tierra por la ineptitud de algunas personas y todo esto bajo un aguacero que no cesa. Llegan algunos en coche y entre decenas de conversaciones entre unos y otros si tira palante con lo planeado, misa de acción de gracias delante Maria Stma de los Dolores y visitas bajo la lluvia, suerte que estabamos cerquita...
Termina la misa y nuestros invitados conocen algo de historia de nuestra Hermandad, así como los aspectos histórico-artísticos de nuestra capilla, del Convento y de la Parroquía de Ntra. Sra. de la Oliva, donde conocimos además de la Parroquía el antiguo claustro (hoy Patio de los Naranjos), la Capilla del Sagrario de Verano y el Tesoro. Por último, visitamos nuestra casa de hermandad, donde comenzamos con el salón de los pasos, para terminar con el resto de dependencias de la Hermandad.
Tras la visita se vuelve al Convento de San Francisco para compartir la comida preparada. Mientras, se dirigen algunos a la estación de Lebrija a recoger al resto de nuestro hermanos macarenos que tuvieron que quedarse en Sevilla por problemas de Renfe y ya que estamos todos comenzamos a degustar el típico ajo de Lebrija, así como una paella y otros entremeses.
Concluye la comida y volvemos a la la Capilla de la Hermandad para hacer la foto de familia delante de nuestros titulares: primero con Nuestro Padre Jesús Nazareno donde se produce un intercambio de recuerdos entre nuestras hermandades, tras esto pasamos a retratarnos junto a nuestra Madre, delante de Maria Stma de los Dolores. Volvemos a la Casa de Hermandad para que los amigos macarenos que llegaron más tarde puedieran conocer nuestra casa y nuestros enseres y de aquí de nuevo para el Convento para dar buena cuenta de la merienda, que no era otra cosa que una deliciosa tarta de flan con galletas además de nuestros habituales Pastelitos Nebrix. Durante estos momentos algunas de nuestras invitadas se dedican a repartir Esperanza...y así concluye un día de visita y convivencia a la espera de la devolución de la visita que en principio está fechada para Mayo, el mes de la Santisima Virgen Maria.
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