jueves, 31 de mayo de 2012
TOMA TU CRUZ Y SÍGUEME
No sé ni porque escribo esto hoy, pero aunque no es mi tipo, hay algo que tenía dentro y que quería contarles.
Como sabéis todos aquellos que me conoceis, no soy especialmente rociero, por ello no suelen aparecer actos de las hermandades que en estos días se hacen a los distintos caminos en busca de la Reina de Almonte, pero lo que hoy quiero contarles sí está relacionado con ellas, concretamente con la Hermandad de mi ciudad, la Hermandad del Rocío de Lebrija.
El asunto es que, casualmente ayer por la tarde estaba trabajando junto a la Parroquia de Ntra. Sra. de la Oliva, lugar dónde tiene su residencia canónica el Simpecado de dicha Hermandad, y por ende la Hermandad entera. Pues lo que les quería relatar es que estando en esta zona escucho a lo lejos un tambor enlutado que me llamó la atención, puesto que sabía que ese día llegaba la Hermandad, y otros años la había visto entrar en Lebrija y lo hacía acompañado de cohetes, cantes, caballos y jinetes y demás sonidos habituales. Es por ello que me suscitó la curiosidad aquel sonido y al asomarme veo venir a los primeros jinetes bajados de sus monturas, tirando de las riendas de sus rocines, cañero al codo y ropa de calle, nada de traje corto como es costumbre, al igual que las mujeres que habían aparcado sus batas rocieras y venían también de calle. Todo el cortejo presentaba esta estructura. Posteriormente el tamborilero, que a la ida hacía sonar la flauta y el tamboril, ahora sólo tañía a luto. Todo esto era algo nuevo que jamás había visto. Algunas personas más mayores y rancio abolengo rociero contaban días antes que esa era la forma de entrar de luto de las Hermandades del Rocío, que recordaban que así fue cuando hace varios años se hundió la barca en la que la Hermandad cruzaba el río.
Todo esto viene a colación de una noticia de los últimos días que ha echo que la Hermandad se decidiera por esta forma de entrar, y dicha noticia es un fatal acontecimiento que tuvo lugar el día de la salida de la Hermandad, que fue la caída de caballo de un niño de cinco años y su primo de siete, este último sin recibir gran daño, pero el pequeño resulto muy mal parado, tanto que el lunes falleció. Un hecho fortuito fruto de la mala suerte que le costó la vida a un niño y destrozó la de otros tantos, principalmente la de sus padres. No es habitual hacer de este espacio un sitio para la crónica negra ni la actualidad social, pero si es esta una noticia que me había consternado y algo me decía que debía contarlo, tanto más puesto que su padre es un costalero de los píes a la cabeza y querría desearle desde aquí que su Bendita Madre de Consolación, a la que pasea en la mañana del Viernes Santo le de consuelo a él y a toda su familia por esa pérdida irreparable. Darle el más sentido de los pésames y todos los ánimos del mundo. Que haga suyo el lema de su Hermandad de la Vera+Cruz, aquel de "TOMA TU CRUZ Y SÍGUEME" y aunque lamentablemente la cruz le ha llegado demasiado pronto que con el tiempo aprenda a llevarla siguiendo al Stmo. Cristo de la Vera+Cruz...
miércoles, 30 de mayo de 2012
martes, 29 de mayo de 2012
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